¿Cuáles son los beneficios de acudir al psicólogo?

¿Por qué es importante buscar ayuda profesional?

Seguro que conoces a alguien que en algún momento de su vida ha tenido un problema y no sabía como enfrentarlo. O puede que esa persona en la que piensas seas tú. Aunque resulte muy favorable disponer de una red de apoyo llena de personas que nos escuchen y comprendan cómo nos sentimos, hay veces que buscar ayuda profesional puede verse como una oportunidad para adquirir nuevas herramientas que ayuden a superar el malestar y a comprender mejor nuestros comportamientos.

¿Cuáles son los beneficios que podemos obtener?

Si una vez has encontrado un profesional acorde a lo que buscas y ambos habéis establecido unos objetivos terapéuticos, los beneficios que se pueden conseguir son varios. Por ejemplo, a corto plazo, la terapia en sí misma proporciona un espacio seguro y acogedor donde podrás expresarte sin ser juzgado. Además, con el tiempo, los beneficios se expanden. La terapia no solo sirve para aliviar un malestar puntual, sino que también enseña a las personas a identificar patrones de comportamiento repetitivos que impiden solucionar sus problemas, permite conocerse mejor, hallar soluciones más efectivas, mejorar las relaciones con las personas que te rodean o superar una enfermedad.

¿Qué problemas pueden abordarse?

Un buen profesional ofrece herramientas efectivas para una variedad de problemas. Cada terapeuta puede abarcar desde trastornos de ansiedad y depresión hasta otras dificultades como la pérdida de alguien querido, problemas de pareja, adicciones, problemas alimentarios, trauma, dolor crónico, etc. Sin embargo, lo verdaderamente importante es que la relación terapéutica sea, profesionalmente hablando, lo más cercana posible para poder realizar un buen proceso evaluativo y por tanto, una intervención adaptada a la persona que tenemos delante para así garantizar el éxito en la terapia.

Para concluir...

En resumen, acudir al psicólogo es un signo de fortaleza que puede ayudarnos a identificar mejor nuestros comportamientos y saber para qué hacemos lo que hacemos. Si el malestar interfiere en tu vida diaria, en tus relaciones, en tu trabajo o estudios buscar ayuda es una inversión crucial tanto a corto como a largo plazo que puede mejorar ampliamente mejorar tu salud mental.

Si nuestra vida fuera un océano y nosotros un pequeño velero que quiere surcar sus mares, la terapia puede ayudarnos a navegar más preparados y con mayor tolerancia a los obstáculos que nos encontremos.